AMLO celebra aprobación de la reforma al Poder Judicial en el Congreso
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, celebró la aprobación en lo general y particular de su reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF), impulsada por la mayoría calificada de Morena, Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Partido del Trabajo (PT) en el Congreso de la Unión.
La reforma, que ha generado un intenso debate y controversia, avanzó con el respaldo de 357 votos a favor, 130 en contra y cero abstenciones.
La sesión, que se desarrolló en una sede alterna debido al bloqueo de los accesos a la Cámara de Diputados por parte de trabajadores del Poder Judicial en protesta contra la reforma, se prolongó por más de 17 horas. Al finalizar la votación, López Obrador destacó la importancia del resultado, calificándolo como una gran victoria para su administración. Es muy buena noticia, muy buena noticia, pasa ya al Senado, 357 (en favor) contra 130 (en contra). ¿Cuántos se necesitaban? 334. Muy bien, comentó el mandatario durante su conferencia mañanera de este miércoles 4 de septiembre.
La reforma al PJF, que ahora será discutida en el Senado, propone cambios significativos en la estructura y operación del Poder Judicial, incluyendo la elección popular de jueces y magistrados, una medida que ha sido vista por sus defensores como un paso hacia la democratización del sistema judicial. Sin embargo, los críticos, incluyendo jueces, magistrados y diversos sectores de la sociedad, han advertido que estas modificaciones podrían vulnerar la independencia judicial y someter a los jueces a presiones políticas.
López Obrador ha argumentado que la reforma busca combatir la corrupción y mejorar la justicia en el país, asegurando que el pueblo debe tener el poder de elegir a sus jueces. No obstante, la aprobación en la Cámara de Diputados ha intensificado las manifestaciones y protestas de trabajadores judiciales, quienes consideran que la reforma es un ataque directo a su autonomía y a los principios fundamentales del Estado de derecho.
Los bloqueos y protestas en las instalaciones del Congreso reflejan la polarización que ha generado la reforma. Los trabajadores del Poder Judicial han expresado su preocupación por las implicaciones de los cambios propuestos y han exigido que se respeten sus derechos laborales y la independencia del sistema judicial. Por su parte, legisladores de oposición han advertido que las modificaciones podrían generar un conflicto de poderes y afectar la impartición de justicia en México.
Ahora, el futuro de la reforma se encuentra en manos del Senado, donde se espera un debate igualmente intenso. Mientras tanto, López Obrador ha reiterado su compromiso de seguir adelante con las transformaciones que, según él, son necesarias para el país. La aprobación en la Cámara de Diputados representa un avance significativo para la agenda del presidente, aunque aún quedan desafíos por enfrentar en el camino hacia su implementación definitiva.